Esta película es un piloto para una serie de televisión que se quedó en nada y que fue ampliado para cerrar la historia y llegar a los cines dos años después. El piloto era muy en la línea de Twin Peaks, una historia con elementos de misterio e investigación con una atmósfera fantástica y surrealista. Hasta cierto momento de la película, Mulholland Drive es una hermana pequeña de Twin Peaks.
Naomi Watts está soberbia. La escena del casting es magistral. La música es intrigante y funcional. Es un poco decepcionante ver a Dan Hedaya o Robert Forster en unas apariciones mínimas.
Pero en la parte final hay un giro importante, y desconcertante. Se puede hacer una interpretación de lo que has visto hasta entonces, claro, pero me parece tramposa, poco original y facilona.
Claro que tiene gracia ver que la tantas veces comentada capacidad onírica de Lynch se traslada a lo que podríamos llamar una representación de pesadillas, sueños premonitorios y sueños eróticos...
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