Un policía políticamente incorrecto y más bruto que un arado y un delincuente que aspira a la elegancia. Un guión que marcó una época, la de las películas con parejas de investigadores muy dispares. Walter Hill en su apogeo.
Me pregunto cómo hubiera quedado con Clint Eastwood o Burt Reynolds o Jeff Bridges o el montón de actores a quienes se les ofreció el papel antes que a Nick Nolte...
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